A pesar de los avances en la medicina moderna como las vacunas, antibióticos y cuidados intensivos, la sepsis mejor conocida como “envenenamiento en la sangre”, sigue siendo la causa principal de muerte por infección a nivel mundial. Se estima que cada 3 a 4 segundos una persona fallece por esta complicación.
La Sepsis es una reacción anómala que el cuerpo humano presenta ante una invasión provocada por bacterias o algún otro organismo; dañando gravemente tejidos y órganos del sistema inmunológico y poniendo en peligro la vida de las personas. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) estima que cada año a nivel mundial aproximadamente 31 millones de personas sufre un episodio de sepsis y 6 millones de estas fallecen a causa de la sepsis avanzada.
La unidad de diagnóstico de Becton Dicknison México (BD) se une al llamado nacional e internacional de diversos organismos de salud para fomentar mejores prácticas médicas para que garanticen un diagnóstico oportuno, así como el uso de sistemas de identificación precoz y tratamiento de emergencia estandarizado a nivel mundial para esta condición infecciosa.
Sin importar cuán importante sea un individuo o el estilo de vida que lleve, la Sepsis afecta a todos los grupos de edad en todos los lugares del mundo. Sin embargo los grupos de personas con mayor riesgo de contraer Sepsis son:
- Neonatos
- Embarazadas
- Adultos mayores de 60 años
- Pacientes hospitalizados
- Personas con enfermedades crónicas (diabetes, enfermedades renales y hepáticas o un sistema inmunológico débil con padecimientos como leucemia o SIDA)
Esta enfermedad es considerada como una emergencia sanitaria que requiere tratamiento oportuno e inmediato, sin embargo el costo humano de la sepsis es inconmensurable. Esta complicación con frecuencia pasa desapercibida o es diagnosticada incorrectamente en sus primeras manifestaciones aun cuando podría ser tratado de forma eficaz.
Infecciones relacionadas a torrente sanguíneo, a las vías urinarias o en la zona abdominal; así como la neumonía o meningitis, son algunas afecciones que causan sepsis. Para hacer frente a los altos costos en atención médica y otros retos de esta patología, existen 5 elementos claves en la lucha contra la evolución de la sepsis.
- Detectar a los pacientes con probabilidad de sepsis para realizar estudios pertinentes y ajustar el tratamiento a la infección primaria.
- Identificar las infecciones resistentes a los antibióticos provocadas por la automedicación y el uso inadecuado de le dan los pacientes. Por eso los antimicrobianos deben ser recetados por un médico que vigile el tiempo de duración, dosificación y modificaciones basadas en cultivos y hallazgos clínicos de diversas infecciones.
- Agilizar la entrega de los resultados de laboratorio para disminuir el tiempo de estancia de Urgencias y Unidades de Cuidados Intensivos.
- Mejorar la toma de muestras de laboratorio y la calidad de la misma dando lugar a resultados más rápido y uniformes, con mayor precisión diagnostica, evitando muestras de baja calidad o re-test.
Utilizar plataformas y herramientas diagnosticas que den un dictamen más rápido, preciso y apropiado para tomar decisiones clínicas más afectivas, incluyendo medidas para determinar de manera apropiada el tratamiento del paciente.