En el marco del Día Internacional de la Nutrición, que se conmemora el 28 de mayo, se busca concientizar sobre la importancia de una alimentación equilibrada y su papel fundamental en la salud pública global

Una gran parte de la población joven adulta en México se encuentra inmersa en jornadas laborales extensas, estudios, compromisos sociales y responsabilidades familiares. Estilo de vida que puede dificultar el acceso a una alimentación balanceada, lo que a largo plazo puede derivar en deficiencias nutricionales que impactan la salud y el bienestar general.
Es por ello que, en el marco del Día Internacional de la Nutrición, que se conmemora cada 28 de mayo, se hace un llamado a reflexionar sobre la importancia de adoptar hábitos alimenticios saludables, especialmente entre los adultos jóvenes que enfrentan rutinas cada vez más aceleradas y exigentes.
Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua 2023, el 75% de los adultos jóvenes entre 20 y 39 años presentan algún grado de sobrepeso u obesidad. También, se ha identificado un bajo consumo de frutas, verduras y leguminosas, así como un alto consumo de bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados.
Tendencias alimentarias que aumentan el riesgo de enfermedades crónicas como diabetes tipo 2, hipertensión y deficiencias de micronutrientes esenciales como hierro, vitamina D, zinc, ácido fólico y vitamina B12, las cuales pueden causar anemia, problemas óseos, problemas neurológicos y afectar el sistema inmunológico.
Se destacó que una nutrición adecuada no solo previene enfermedades, sino que también mejora la energía, la concentración y el estado de ánimo.
Por su parte, la Dra. Paola Maldonado, líder de asuntos médicos de Haleon, aseguró que la suplementación con multivitamínicos se presenta como una herramienta complementaria para cubrir necesidades específicas y apoyar una vida saludable.
Finalmente, se reiteró la importancia de una alimentación equilibrada y su papel fundamental en la salud pública global, es una oportunidad para promover la educación alimentaria, fomentar decisiones informadas y recordar que pequeños cambios pueden tener un gran impacto en la salud a largo plazo.